Aspiraciones de jóvenes titulados en Francia: un estatus desmesurado
Salarios “astronómicos”, vehículo de empresa y vivienda, días de vacaciones... Las expectativas de los jóvenes titulados en Francia a veces parecen no tener límites. Una tendencia que preocupa a muchos audioprotesistas al frente de centros auditivos, que no pueden seguir el ritmo de puja en esta especie de subasta por los recursos humanos.
Debido a la escasez de audioprotesistas en el país vecino, cada vez más estudiantes piden sueldos de entre 7.000 y 9.000 euros brutos al mes una vez que se han graduado. Es la misma cantidad que un audioprotesista con varios años de experiencia ya está luchando por ganar, por encima de la de un interno de hospital o un ingeniero junior…
Los testimonios que Audio infos ha recogido hablan por sí mismos. “Cada vez es más difícil encontrar un joven técnico de audiología por menos de 4.000 euros al mes. Es un sueldo difícil de mantener para una pequeña empresa”, se lamenta un profesional independiente de la zona de Haute Garonne.
Muchos nuevos actores llegan al mercado
Según los audioprotesistas, estas demandas salariales tan elevadas son el resultado de la introducción del régimen de seguro médico del 100% de cobertura de la Seguridad Social para los audífonos y del aumento de la actividad en los últimos meses.
“Hay muchos nuevos actores, sobre todo entre las cadenas de óptica que se están diversificando. No se abren para ganar dinero a corto plazo, sino para hacerse con la cuota de mercado. Los jóvenes licenciados se aprovechan de la situación. Se encuentran en una posición fuerte en el mercado laboral y es probable que esto continúe a lo largo de 2022 e incluso en 2023. Pero el viento volverá a soplar en otra dirección, sobre todo cuando lleguen los titulados españoles. Ya hubo un movimiento similar en 2005, y luego los salarios volvieron a un nivel razonable”, dice un autónomo de Lyon.
Un enfrentamiento que durará poco tiempo
La mayoría de los audioprotesistas creen que esta guerra de fichajes caros no durará y que la llegada de los diplomados de las escuelas españolas frenará este frenesí: es la ley de la oferta y la demanda.
Los profesionales al frente de gabinetes auditivos también señalan la alta rotación de ciertas marcas, que están dispuestas a ofrecer mucho, pero que también exigen mucho a cambio. “Los jóvenes titulados tienen que darse cuenta de que se necesita tiempo después de la graduación para demostrar su valía y continuar su formación. Tienen que preguntarse cuál es la rentabilidad. ¿Qué tengo que hacer para ganar tanto? ¿Realmente se me permitirá seguir a mis pacientes como necesitan o se me pedirá que ”venda“ más y más audífonos?”, dice un audioprotesista del norte de Francia, antes de añadir: “Reconozco que estos sueldos pueden hacer girar la cabeza de la gente, especialmente de los jóvenes”.
El salario no es el único criterio requerido
Aunque algunos consideran que el salario es el criterio número uno para elegir un primer empleo, otros buscan prestaciones diferentes: un vehículo de empresa, un máximo de dos centros de trabajo, un sueldo variable garantizado, una distancia entre el gabinete y el domicilio que pueda cubrirse en bicicleta, muchos días de vacaciones…
Aunque los jóvenes titulados quieren un trabajo estimulante, también piden un muy buen ambiente de trabajo, lugares agradables para hacer descansos y responsabilidad social corporativa. Hay pocos sectores en los que los estudiantes estén tan solicitados, así que ¿por qué deberían privarse?
La Fnéa advierte del riesgo de esta”subasta“
El presidente de la Federación Nacional de Estudiantes de Audioprotésica (Fnéa), Ikram Yahyaoui, explica el origen de esta escalada de expectativas salariales entre los estudiantes:”Estamos asistiendo a una auténtica guerra de ofertas. Esto es el resultado de un cambio de mentalidad cuando se es estudiante. Cuando nos dicen en el primer curso que ganaremos 3.500 euros después de graduarnos, pensamos que eso es enorme. Luego, en el tercer año, tras hablar con los jóvenes titulados, algunos de ellos consideran esta cantidad como calderilla y sueñan con sueldos exorbitantes“, relata.
”Sin embargo, no debemos olvidar que para ganar el salario y los beneficios que conlleva hay que hacer verdaderos sacrificios“, matiza.”Los jóvenes titulados deben mantener los pies en el suelo. Tenemos valía por nuestra formación, pero aún debemos demostrar nuestras habilidades. Si empezamos con un salario razonable, nos permite evolucionar, lo que es más gratificante. Es mejor que tener un gran sueldo de inmediato con mucha presión. Porque la contrapartida de un gran salario es la obligación de facturar. Esto puede hacer demasiado comercial la relación con los pacientes, que no es uno de los valores de los audioprotesistas. Somos profesionales de la salud, no simples comerciantes“, apostilla el presidente de la Fnéa.