Día Nacional de la Audiología Protésica
En conmemoración de la creación de la Asociación Nacional de Profesionales Audioprotesistas (ANA), que se fundó en 1976, el 2 de noviembre se ha instaurado desde el año pasado como "una fecha para reconocer el relevante papel de los audioprótesistas y/o audiólogos protésicos en la atención de la salud auditiva", resaltan desde esta entidad. "Se trata de una de las profesiones más demandadas en la actualidad", añaden
El objetivo de esta efeméride es sensibilizar y dar a conocer a la población, la sordera y la discapacidad auditiva como problemas de salud pública y educar acerca de la prevención de la hipoacusia a través de los buenos cuidados de la audición, tal como han señalado desde la agrupación profesional decana en el sector.
¿Qué es la Audiología Protésica? ¿Qué hace un audioprotesista o audiólogo protésico? ¿Cuál es el origen de esta profesión? Son los interrogantes básicos a los que da respuesta.
“La Audiología Protésica es una profesión sanitaria, no médica, que se enfoca al estudio de la funcionalidad del sistema auditivo y vestibular, así como a proporcionar la solución más adecuada para cada tipo de paciente. Los profesionales conocidos como audioprótesistas o audiólogos protésicos se encargan de prevenir, detectar, tratar, rehabilitar con el uso de los dispositivos de ayuda, audífonos, dispositivos osteointegrados, implantes cocleares.., los problemas de funcionalidad auditiva y dar seguimiento a la audición de sus pacientes. Son los profesionales que fundamentan el cuidado de la audición”. De esta manera definen la especialidad.
Algunas de las funciones principales de un audiólogo protésico incluyen:
Realizar la exploración audiológica para la detección de la hipoacusia, este es un procedimiento que engloba una serie de pruebas audiológicas como otoscopia y/o videotoscopia, audiometría tonal y vocal, audiometría supraliminar, impedanciometría, otoemisiones, potenciales evocados, pruebas vestibulares… todas estas pruebas determinan el grado y el tipo de perdida que presenta el paciente.
Los resultados de las pruebas van a determinar el tipo de ayuda auditiva más adecuada a cada diagnóstico, además es importante considerar otros factores como las preferencias personales del paciente, entorno sonoro en el que se desenvuelve, estilo de vida, alteraciones en su salud, patologías asociadas, morfología y anatomía del oído. “Todo ello en su conjunto va a permitir tratar la pérdida de audición con la selección de los características más precisas y técnicas de los audífonos y realizar el ajuste de los mismos, lo que conlleva una adaptación personalizada”, subrayan.
La educación protésica supone enseñar al usuario cómo usar y cuidar sus audífonos, además es importante el seguimiento de los mismos, para comprobar que los dispositivos funcionen correctamente a lo largo de su vida útil.
¿Cuál es el origen de la Audiologia Protésica?
El concepto de Audiología se atribuye a diferentes autores, fue Berger quien identificó a sus posibles creadores: Schier, Nowak, Canfield, Hargrave. En 1946, Carhart y colaboradores la definieron como “la ciencia que se ocupa de las alteraciones auditivas tanto en oído normal como patológico”. Fue entonces donde se ofreció el primer curso universitario de EEUU para audiólogos.
La Sociedad Internacional de Audiología (ISA) se fundó en 1952 para “facilitar el conocimiento, la protección y la rehabilitación de la audición humana” y para “servir como defensora de la profesión y de las personas con discapacidad auditiva en todo el mundo”. Este organismo promueve interacciones entre sociedades nacionales, asociaciones y organizaciones con las mismas inquietudes y misiones similares.
En España, hay registros que indican que en la década de los años 60 se constataba una gran carencia de formación en el sector de los audífonos. Los primeros de estos dispositivos con circuito integrado aparecieron en el mercado en 1970, ofrecían muchas posibilidades de modificación de procesamiento de señal desconocidas hasta entonces. “Como consecuencia, se hacía más evidente la necesidad de formar a las personas que adaptaban audífonos, surgió la necesidad de impulsar una legalización de la profesión y de generar un nuevo ordenamiento relativo a autorizaciones o legalizaciones en la adquisición de audífonos”, rememoran desde la ANA.
En 1976, un grupo de personas impulsaron la formación de los audioprotesistas, en la medida que avanzaba la tecnología, “consideraron fundamentar el ejercicio profesional y lucharon por pertenecer a entidades asociativas que consolidarán el papel de la organización dentro y fuera de España”, continúan su relato.
En 1977, la ANA fue admitida en la Asociación Europea de Audioprotesistas (AEA). “Desde entonces, gracias a su intensa actividad con la Administración, se ha logrado crear un marco legal de regulación importante en torno a la formación de los audioprotesistas, la profesión y la adaptación de los audífonos y seguimos avanzando en defender los intereses de los asociados dado el creciente y especializado colectivo de audioprotesistas y audiólogos protésicos”, subrayan.
Actualmente la asociación profesional aboga por una formación de calidad con apoyo a las escuelas, así como la divulgación de información en temas relacionados con la prevención y el cuidado de la audición.
“Gracias a estos orígenes, hoy en día es una de las profesiones más demandadas con una inmediata inserción laboral en el entorno clínico con una posibilidad de promoción profesional continuada”, resaltan desde la asociación presidida por Francesc Carreño.